El papel de la voluntad en el cultivo personal y la realización personal
Dijo Gorki:
Generamos deseos y exigencias a partir de las emociones para formar nuestros ideales. Lo que el ideal encarna es nuestra voluntad. Algunas de nuestras voluntades son débiles y otras fuertes. Si tenemos una voluntad débil, las dificultades y los reveses nos derrotarán fácilmente, y sólo podremos realizar nuestros ideales navegando sin problemas. Sólo cuando tenemos una voluntad fuerte podemos ser valientes. Sólo siendo valiente se puede desarrollar fácilmente el coraje y la sabiduría necesarios para superar las dificultades y los reveses. Sólo con el coraje y la sabiduría para superar las dificultades y los reveses podremos sobrevivir en situaciones desesperadas y tener la esperanza de hacer realidad nuestros ideales frente a la adversidad.
Generalmente nos gusta hablar de ideales y rara vez tomamos medidas prácticas. Porque todo es más fácil decirlo que hacerlo. No estamos dispuestos a poner nuestros ideales en acciones prácticas porque generalmente sentimos que es difícil. Si estamos dispuestos a ser mediocres, entonces no debemos considerar ideales elevados. Si quieres tener ideales elevados, debes optar por actuar con voluntad para superar las dificultades.
La acción voluntaria está relacionada con la superación de las dificultades, y el proceso de superación de las dificultades es también el proceso de la acción volitiva. Hay dos tipos de dificultades: dificultades externas y dificultades internas. Si la voluntad de una persona es fuerte o no, y qué tan fuerte es, se miden por la naturaleza de las dificultades y la facilidad para superarlas.
Nuestra voluntad se puede fortalecer mediante el cultivo y el entrenamiento. El cultivo y el entrenamiento de la voluntad deben comenzar con los adolescentes y comenzar con las cosas pequeñas. Los adolescentes se encuentran en la etapa de dominar el conocimiento y deberían saber utilizar las pequeñas cosas de la vida para cultivar su voluntad. Hay muchas pequeñas cosas en la vida, como no escupir, no tirar basura, mantener la higiene personal, controlar el tiempo de juego, resistir la tentación de los snacks, hacer ejercicio regularmente, etc. Descubre tus propias debilidades y carencias, persiste en superarlas, empieza desde las pequeñas cosas, empieza desde ahora y persevera, para que poco a poco puedas desarrollar tu propia voluntad y cualidad.
Cultivar y entrenar la capacidad de autocontrol desde las pequeñas cosas es el punto de partida de una voluntad fuerte. Con un buen punto de partida, puede mejorar su cognición mediante un estudio diligente y esforzarse por dominar las diversas habilidades necesarias para realizar sus ideales. Aprender requiere fuerza de voluntad, y aprender también es una forma de ejercitar la fuerza de voluntad. Fíjese una meta de aprendizaje y persevere para lograrla. Mejore su fuerza de voluntad a través del proceso de estudio diligente.
Debemos partir de lo ideal y formular un plan por fases práctico y factible. Complete algunas tareas que son difíciles pero que están dentro de sus capacidades del plan por fases. Si una tarea es demasiado simple o demasiado fácil, no inspirará la fuerza para superar las dificultades y no tiene valor para entrenar tu voluntad; si es demasiado difícil y no puedes tener éxito por mucho que lo intentes, tu confianza en ti mismo disminuirá; dañado y tampoco podrás entrenar tu voluntad. Cada uno de nosotros tiene diferentes cualidades de voluntad y debemos diseñar métodos de ejercicio correspondientes basados en nuestras propias características de voluntad para lograr mejores resultados.
Nuestra fuerte voluntad puede compensar la falta de salud física, para que las personas con discapacidad también tengan el coraje y la confianza para superar las dificultades y realizar sus ideales. Desde la perspectiva del papel de la voluntad, no sólo nos da coraje y confianza, sino que también nos ayuda a lograr una mejora general de la calidad física, cognitiva y emocional. Sólo cuando tenemos una voluntad fuerte podemos persistir en hacer ejercicio, estudiar mucho y esforzarnos mucho. La voluntad puede regular nuestras emociones y emociones. Con una voluntad fuerte, podemos controlar y superar la interferencia de las emociones negativas, dejar que las emociones obedezcan a la razón e implementar acciones de voluntad hasta el final. Las personas de voluntad débil pueden fácilmente convertirse en prisioneras de sus emociones, impidiéndoles perseverar en sus acciones volitivas.
La cualidad formada a partir de la voluntad nos facilita mantener la independencia, no sucumbir a la presión del entorno y no seguir a la multitud. Esto nos permite tomar decisiones siempre de forma independiente e implementarlas en función de nuestros propios conocimientos y creencias. Las cualidades formadas a partir de la voluntad nos harán más decididos, capaces de tomar decisiones bien fundadas en el momento oportuno y de implementarlas sobre la base de una cuidadosa consideración. Las cualidades formadas a partir de la voluntad nos permiten generar constancia. A la firmeza también se le llama tenacidad. La firmeza nos permite insistir durante mucho tiempo en la racionalidad de nuestras decisiones y trabajar incansablemente para implementarlas. La cualidad formada a partir de la voluntad nos da autocontrol y nos hace buenos para controlar y controlar nuestras acciones. Independencia y decisión en la toma de decisiones, sumada a firmeza en la ejecución, igual autocontrol.
El efecto regulador de la voluntad sobre la acción asegura la direccionalidad del comportamiento humano, y el resultado final de la regulación es la realización del propósito predeterminado. Cuando la razón y la emoción entran en conflicto, el poder de la voluntad se refleja en el control de las acciones para obedecer a la razón. Si tenemos una voluntad débil, fácilmente podemos perder la cabeza y ser controlados por emociones y emociones, lo que lleva al fracaso de nuestros ideales.
Algunas personas saben muchas verdades, están llenas de conocimientos y tienen talento, pero tienen mala conducta y pocos logros. Es debido a una voluntad débil que uno no puede usar la razón para regular y controlar sus emociones y emociones. Sólo con una voluntad fuerte podrás tener el sentido común de resistir todo tipo de tentaciones y no rendirte a mitad de camino, para que puedas realizar fácilmente tus ideales.