Cómo mejorar la inmunidad

Cómo mejorar la inmunidad

Dieta equilibrada: La dieta diaria debe ser equilibrada. Las comidas diarias deben incluir proteínas de alta calidad, carbohidratos de alta calidad, frutas y verduras frescas, etc. Consuma una dieta equilibrada, con una combinación razonable de alimentos, sin comer en exceso, sin ser exigente con la comida y sin ser exigente con la comida, para preparar reservas nutricionales básicas para el cuerpo.

Suplementos nutricionales: En la vida diaria, los complementos nutricionales se pueden utilizar para complementar los diversos nutrientes que necesita el cuerpo humano. Varios nutrientes juegan un papel importante en la mejora de la capacidad de autoprotección del organismo, por lo que es necesario complementarlos en cantidades adecuadas.

Trabajo y descanso regulares: Debes tener un horario regular de trabajo y descanso y evitar trasnochar. Los daños que provoca trasnochar son irreversibles y afectarán a tu salud.

Ejercicio adecuado: Asegúrate de hacer ejercicio más de tres veces por semana. Puedes elegir yoga, caminar lento, natación, etc. según tu propia situación, preferiblemente 30-45 minutos cada vez.

Consúmelos con una dieta equilibrada

Alimentos ricos en proteínas: carne de res, cerdo, cordero; pescado, especialmente pescado marino y huevos de camarón, tofu, productos de soja (como la soja) ; nueces; Levadura (más del 50% de proteína en la levadura), leche y productos lácteos (leche pura, yogur, queso).

Alimentos ricos en vitamina A: hígado animal, yema de huevo, aceite de pescado, leche o productos lácteos; algunas frutas: melón, melón; mango, naranja, cereza, etc.

Alimentos ricos en zinc: mariscos: ostras, vieiras, etc., y otros mariscos con cáscara; frutos secos o semillas (nueces, almendras, cacahuetes, etc.) y alimentos de carne y huevo (hígado, carnes magras, huevos, lácteos, etc.).

Alimentos ricos en hierro: hígado animal, hemoderivados animales, carnes rojas y otros alimentos animales.

Alimentos ricos en vitamina C: kiwi, tomates, hortalizas verdes, zanahorias, dátiles, naranjas, fresas, etc.

Qué complementos nutricionales se deben tomar

Proteínas: La proteína es la materia prima para producir células inmunes y moléculas inmunes. En pocas palabras, cuanta más proteína, más células inmunes. Cuando la ingesta de proteínas es insuficiente, es fácil enfermarse.

Vitamina C: La vitamina C tiene efectos antioxidantes y es una vitamina indispensable para el sistema inmunológico humano.

Hierro: La deficiencia de hierro puede provocar anemia y reducir la capacidad de resistir infecciones. Los bebés, los niños pequeños, las mujeres embarazadas y las madres lactantes tienen más probabilidades de desarrollarla.

Zinc: El zinc es un componente de más de 100 enzimas del cuerpo humano y juega un papel importante en el desarrollo del sistema inmunológico y el mantenimiento de las funciones normales.

Lactoferrina: La lactoferrina tiene funciones antimicrobianas, favoreciendo el desarrollo intestinal, favoreciendo la absorción del hierro y la regulación inmunológica.

Vitamina A: La deficiencia de vitamina A puede provocar queratinización y degeneración de las células respiratorias, digestivas, urinarias y epiteliales, haciéndolas susceptibles a la invasión bacteriana.

Selenio: El selenio está presente en casi todas las células inmunitarias. La suplementación con selenio puede mejorar significativamente la inmunidad del organismo.

Probióticos: Mantienen el ambiente microecológico normal del intestino y desempeñan un papel importante en la resistencia a la invasión de patógenos extraños.

Beta glucosa de levadura: Puede reducir el riesgo de infección del tracto respiratorio superior y está presente en la pared celular de la levadura.