Letras de canciones de Anheqiao
La letra de la canción “Anhe Bridge” es la siguiente:
Déjame verte otra vez
De sur a norte
Como Con los ojos vendados en la quinta circunvalación
Por favor, cuéntame otra vez
Sobre ese día
La chica que sostiene la caja
Se frota A hombre sudoroso
Conozco esos veranos
Al igual que la juventud, no se puede volver
Lo que puede reemplazar los sueños sólo puede ser la desgana
Sé que me reiré con mi juventud si presumo de ello
Déjame quedar atrapado en la ciudad
Recuerdo tuyo
Deja Pruebo otro
Vino de otoño
Sigue conduciendo hacia el sur
No pasará mucho tiempo
Déjame escuchar de nuevo
La frase más bonita
Estás en casa
Te estoy esperando
Lo sé
Esos veranos son como juventud y no puedo volver
Lo que reemplaza los sueños
sólo se puede hacer con dificultad
Lo sé
Presumir, me reiré con mi juventud
Déjame quedar atrapado en la ciudad para conmemorarte
Lo sé
Esos veranos nunca volverán como tú
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Ya no tendré grandes expectativas para nadie
Lo sé
Hay demasiados arrepentimientos en este mundo todos los días
Así que, hola, adiós
Canción de agradecimiento a "Anhe Bridge"
Song Dongye cuenta los triviales acontecimientos pasados del mundo en una voz baja y ronca, tan sincera y simple. No existen técnicas magníficas, ni gritos ni ruidos, pero a menudo los talentos más simples son los más poderosos. La guitarra y las cuerdas limpias y elegantes, y las palabras cálidas y ligeramente decadentes se han convertido en su regalo para esta impetuosa era.
La letra de la canción expresa algo muy vago y complicado, pero el público quedará conmovido después de escucharla. Todo el mundo tiene un lugar como el Puente Anhe que guarda recuerdos de la infancia. Un recuerdo, una impotencia o un poco de pérdida y sentimentalismo, este estado de ánimo nostálgico puede despertar la resonancia emocional del oyente.
"Anhe Bridge" canta sobre la memoria de haber sido demolido en el proceso de urbanización. "Esos veranos son como la juventud y nunca podrán volver" y los vaivenes de la pandereta son un suspiro bajo el puente de Anhe. La nostalgia y el toque humano que impregnan aquí son el silencio del hormigón armado.