¿Conoces el significado del amor con curvas?
El amor es un reloj de arena, un reloj de arena que no sabe la hora exacta. Siempre se escapa debido a tu descuido. Puede ser tan misterioso como un hilo, o puede fluir como un arroyo, o puede temblar como un deslizamiento de tierra. Nadie puede saber el momento exacto en que termina un amor. Sin embargo, las palabras y los hechos del dueño del reloj de arena del amor siempre afectan su fluir. Si quieres prolongar la vida del amor, debes dedicar tu sinceridad y entusiasmo a tapar la brecha que permite que el amor se filtre y haga que el amor envejezca más lentamente. ¡No lleva mucho tiempo, sólo cien años!
El amor es un reloj de arena, un reloj de arena irreversible. Cuando el amor se escapa silenciosamente de los espacios entre las yemas de tus dedos, no hay forma de dejar que regrese, porque el otro extremo del reloj de arena son los ojos del amante, y la arena del amor cae en ellos, y solo lágrimas amargas y felicidad sin fin. son devueltos. ¡Cuánto amor puede volver, cuántas personas vale la pena esperar, ésta es la emoción de muchas personas atrapadas en el amor! ¡Hay amantes en el mundo! ¿Hay alguna razón para dejar que el amor se siga escapando de tus manos? ¡Sólo agarrando el reloj de arena del amor podrás tener amor eterno!
El amor es un reloj de arena, un reloj de arena que precipita el amor. No importa cuán puro sea el amor, siempre hay defectos que todos desconocen. Las personas exitosas en el amor siempre usan este reloj de arena para filtrar todos los factores desfavorables del amor. La gente siempre dice que cuanto más largo es el amor, más fragante y puro es. ¡Esto se debe a que el amor se sublima y fermenta después de filtrarse a través del reloj de arena, convirtiéndose en una esencia asombrosa!
El amor es un reloj de arena, un reloj de arena colocado frente a cada amante. Si puedes manipularlo como desees, ¡puedes manipular el amor como desees! Sin embargo, esta no es una tarea fácil. Si lo rompes accidentalmente, no sólo te cortará la mano, sino que también te lastimará el corazón...