Prevención de convulsiones en bebés

Prevención de las convulsiones infantiles

Las convulsiones infantiles tienen un cierto impacto en la salud de los niños. La prevención activa es una medida eficaz para proteger la salud de los niños. Los principales métodos de prevención son:

1. Reforzar los cuidados de enfermería y el ejercicio físico en los niños. Las ventanas deben abrirse con frecuencia en el interior para ventilar y se debe permitir que los niños salgan al aire libre con más frecuencia para que el cuerpo pueda adaptarse al medio ambiente y reducir la aparición de enfermedades infecciosas.

2. Presta atención a la nutrición. Además de la dieta a base de leche, los niños también deben añadir de manera oportuna alimentos complementarios, como aceite de hígado de bacalao, tabletas de calcio, vitamina B1 y vitamina B6, y diversos minerales. No se debe hacer que los niños tengan hambre para evitar la hipocalcemia y las convulsiones hipoglucémicas. .

3. Utilizar los medicamentos de forma adecuada y racional para evitar que los niños tomen accidentalmente drogas tóxicas.

4. Fortalecer los cuidados. Evite que los niños se golpeen la cabeza y les causen traumatismos cerebrales, y no los golpee en la cabeza con las manos a voluntad. Si un niño tiene una convulsión, déjelo acostarse de costado, desatarle el cuello y envolver un depresor de lengua con un pañuelo o colocar palillos entre los dientes superiores e inferiores para evitar que se muerda la lengua, mantener al niño tranquilo y prohibirle todo; estimulación innecesaria. Si un niño con convulsiones tiene fiebre alta, puede usar agua fría, agua de pozo o alcohol 30-50 para bañarse, o usar un enema de agua fría con sal y usar gotas intranasales de metamizol o inyecciones antipiréticas intramusculares. Si las convulsiones persisten, se le debe enviar al hospital para recibir tratamiento de inmediato. Cuidados de enfermería de las convulsiones infantiles

No importa cuál sea la causa de las convulsiones, el primer paso es tomar medicamentos para controlar las convulsiones lo antes posible, de lo contrario, las convulsiones prolongadas pueden provocar fiebre o afectar el corazón y el cerebro. funciones, y algunos pueden morir por asfixia. Y una buena atención puede prevenir muertes inesperadas en los bebés.

1. Colocar al niño correctamente. Acueste al bebé con convulsiones en la cama y acuéstelo de costado para evitar que el vómito ingrese a la tráquea. Desate el collar y afloje el cinturón. Asegúrese de no pedirle a los miembros de la familia que muevan al bebé, manténgalo en silencio y pida a alguien que cuide al bebé junto a la cama para evitar que se caiga.

2. Prevenir las mordeduras de lengua. Para evitar que el bebé se muerda la lengua cuando tiene trismo durante las convulsiones, se puede colocar una gasa de tela entre los dientes superiores e inferiores, o se puede envolver un depresor de lengua con una gasa. No hagas palanca con fuerza cuando los dientes estén apretados.

3. Mantener las vías respiratorias abiertas. El niño no tose ni traga cuando tiene convulsiones, por lo que debe acostarse de lado para permitir que la flema o las secreciones de la boca salgan por sí solas. Si hay demasiada secreción, se debe succionar con un catéter para evitar bloquear la tráquea y provocar asfixia.

4. Presta atención a la respiración. Generalmente, independientemente de si la tez es azul o morada, se debe inhalar oxígeno para proteger el tejido cerebral y prevenir la encefalopatía hipóxica.

5. Descubra la causa de la convulsión lo antes posible.