¿Qué debo hacer si mi hijo no puede concentrarse?
En segundo lugar, cómo concentrarse en clase. Uno de los consejos para prestar atención en clase es adquirir el hábito de hacer preguntas. Puedes aprovechar para hacer preguntas al profesor, o puedes anotar las preguntas relevantes en tu cuaderno y resolverlas después de clase. Además, la aplicación de notas también es muy importante. Mientras escucha la clase, registre los puntos clave, los puntos clave y las dificultades mencionados por el maestro en un cuaderno de manera oportuna. Esto le será de gran ayuda para mantenerse al día con el progreso del maestro y evitar que se distraiga.
En tercer lugar, enséñese usted mismo a concentrarse mientras lee. A continuación se ofrecen algunos consejos para ayudar a los estudiantes desconectados a mantenerse concentrados por más tiempo.
Cuando empieces a aprender, establece tareas para ti, aclara tus objetivos de aprendizaje y limita tu tiempo. Tener cierta presión de estudio puede ayudarte a concentrarte más;
Utiliza herramientas auxiliares. Al revisar y leer, es útil escribir y leer notas de manera específica.
Leer la consulta activa. El llamado método de investigación activa significa que no sólo tienes que leer el contenido del libro de texto, sino también añadir tus propias opiniones. ¿Se te ocurre un mejor resultado? ¿Hay otras soluciones? ¿Cuáles son las conexiones, extensiones y aplicaciones del contenido actual? ¿Cómo resumir conocimientos y formar tu propio sistema? El método de investigación activa no sólo nos permite concentrarnos, sino que también nos ayuda a profundizar nuestra comprensión del conocimiento, sacar inferencias de un caso y mejorar la eficiencia del aprendizaje.
Además, hay algunos malos hábitos que es necesario superar para poder concentrarse.
No agites el bolígrafo mientras lees. Mucha gente tiene este hábito. Es maravilloso tener un bolígrafo girando entre los dedos, pero es una de las cosas que obstaculiza la concentración.
Intenta no desarrollar el hábito de escuchar música mientras lees. En su lugar, escucha música para relajarte entre lecturas.
No preguntes al profesor ni a tus compañeros cada vez que tengas una pregunta. Es mejor que investigues por tu cuenta antes de preguntar. Preguntar frecuentemente a los demás fácilmente te hará impetuoso y poco sofisticado.
Por último, la concentración tiene mucho que ver con el sueño y el descanso. Los estudiantes de secundaria deben prestar atención al equilibrio entre trabajo y descanso en sus estudios y vidas. Se debe garantizar el sueño, normalmente no menos de 7 horas de sueño al día. Es muy indeseable comprimir el sueño a ciegas y extender el tiempo de estudio, ya que no favorece la eficiencia y el efecto del estudio, trae problemas al estudio del día siguiente y también tendrá un impacto negativo en el cuerpo. Además, también es necesario relajarse adecuadamente después de estudiar. Las investigaciones muestran que cuando las personas toman descansos frecuentes para aliviar el estrés del día, son mucho más productivas en el trabajo y el estudio, y sus niveles de concentración aumentan en consecuencia.