¿Qué nos queda tras la proliferación de titulaciones académicas?
Después de la proliferación de títulos académicos, lo que nos queda es la reflexión serena.
Lo que es discutible es que la popularización de la educación superior es una necesidad para el desarrollo de la sociedad moderna (una característica importante de esta sociedad es la basada en el conocimiento y la innovación), y es sesgado interpretarlo como " una proliferación de cualificaciones académicas". En una sociedad así, si todavía te aferras a la vieja idea de que mientras vayas a la universidad tendrás un "cuenco de arroz de hierro", inevitablemente serás eliminado por la sociedad. Necesitamos darnos cuenta de que ir a la universidad ahora no debería consistir en obtener diplomas, sino en mejorar la calidad física y mental.
Ahora que hemos notado que el éxito de los graduados de la Universidad de Pekín vendiendo carne de cerdo radica en su cultura corporativa única, que está fuera del alcance de otros pares, debería quedar claro que la causa fundamental es su mayor calidad general. . Esto tiene alguna conexión inevitable con la educación universitaria de la Universidad de Pekín.
El éxito del "Cerdo nativo número uno" sólo nos dice que la calidad es más importante que las calificaciones académicas.