Red de conocimiento del abogados - Cuestiones jurídicas del divorcio - Ensayo en prosa sobre la memoria del callejón

Ensayo en prosa sobre la memoria del callejón

En mi memoria, el callejón está lleno de felicidad ordinaria, dejando un recuerdo ardiente de mi infancia. El callejón de mi ciudad natal es muy estrecho, con varios edificios y bungalows esparcidos a ambos lados, y un camino sinuoso se abre en el medio, lo que amplía mi memoria. El callejón de mi pueblo natal es muy largo, pavimentado con grava o pizarra. Es donde dejé las risas de mi infancia y mi primer amor de adolescente, cuando lo dejé me quedé muy decepcionado...

Los callejones siempre están tranquilos y dan a la gente una sensación de luminosidad y comodidad. En el callejón se pueden escuchar claramente sus pasos y, en verano, se oye ocasionalmente el sonido de la lluvia de ayer goteando de los aleros. Caminando por el callejón lluvioso, no pude evitar recuperar los recuerdos polvorientos, y mi estado de ánimo regresó al pasado distante... El callejón vino de las profundidades de los años, y los años se solidificaron en cada ladrillo y teja en el callejón. Mira esas viejas paredes cubiertas de musgo, llenas de las canciones y risas de mi infancia. El tiempo vuela en el callejón, pero no puede impedir que camine como el viento. Página tras página de imágenes pasaron ante mis ojos, permitiéndome revivir la belleza en mi memoria cada vez que las leía.

El callejón en la memoria es la prosa pacífica más antigua, que siempre recuerda a la gente del pueblo a la chica esbelta de la antigüedad. Ella siempre está escondida en un tocador apartado en un callejón remoto. No tiene reparos en aparecer, pero tiene un temperamento tranquilo y pausado. Los callejones suelen tener una atmósfera animada y armoniosa. Cada noche de luna, los callejones son lugares donde la gente va a refrescarse. Está lleno de pequeños taburetes y sillas de mimbre. Los mayores y los jóvenes se sientan juntos y disfrutan de la luz de la luna y la brisa fresca. Los padres duran poco y hay muchas historias interesantes en el callejón. La gente en un callejón formaba un gran círculo, charlando sobre el vasto mar y el cielo, divirtiéndose feliz e indiferentemente. Por supuesto, los lugares más concurridos son las casas de té y los restaurantes de la calle. Los aldeanos sentados adentro bebían té popular de baja calidad y bebían lentamente vino de baja calidad, lo cual era pausado e interesante.

Los dos lados del callejón están llenos de residentes, y los aleros están conectados. Las campanillas, las glicinas y la hiedra trepan desesperadamente por las paredes, dándole al callejón una sensación poética. Al caminar por el callejón, no hay necesidad de señales de tráfico ni señales de dirección. El callejón es muy profundo, como una enredadera, y conecta un pequeño pueblo. A lo largo del callejón siempre puedes encontrar una puerta abierta. La gente en el callejón es muy amigable y siempre te guiará cuando vengan extraños.

Cuando la luz del sol brilla desde varios espacios abiertos, el callejón se vuelve tridimensional, iluminando cada detalle del callejón. Hojea las páginas del callejón, entra por la entrada del callejón, detente en cualquier lugar y llama a una puerta. Incluso los detalles que no están iluminados por el sol te serán revelados. En el callejón, un libro encuadernado en hilo brilla ante los ojos de todos los transeúntes. Los habitantes caminaron miles de veces por las callejuelas antes de llegar a la colorida metrópolis. Pero no importa a dónde vayan los habitantes, los callejones envolverán los corazones de los habitantes como cuerdas de cáñamo, haciendo retroceder sus pensamientos.

Mi ciudad natal ya no es lo que era. Los callejones han sido reemplazados por edificios de gran altura. Es difícil encontrar rastros de los viejos tiempos. Sin embargo, mi apego a él no se puede eliminar, no sólo porque hay un pasado inolvidable en el callejón, sino también por su tranquilidad, calidez y toque humano. Los callejones ahora están etiquetados con la marca de la época, grabada con una especie de coraje, una especie de búsqueda y una especie de innovación. Pero su cariño aún vive en mis sueños.