¿Cuál es la diferencia entre la presión arterial de personas delgadas y gordas?
La obesidad es sólo un factor en la presión arterial alta. Hay muchas causas de la hipertensión arterial, como la genética, el consumo elevado de sal, el consumo de alcohol, las emociones, etc.
1. Una causa importante de presión arterial alta en personas delgadas es la emoción. Sus estados de ánimo fluctúan mucho y son inestables.
Están impacientes y emocionados. Cuando las personas están emocionales o enojadas, su presión arterial también aumentará. En este caso, cuantas más veces, mayor será su presión arterial. Al mismo tiempo, las personas irritables son propensas a sufrir enfermedades coronarias y la hipertensión combinada con enfermedades coronarias serán complicaciones graves. Con el tiempo conduce a enfermedades graves como el infarto de miocardio.
2. Las personas delgadas desarrollan hipertensión en promedio más tarde que las personas obesas. Cuanto más envejece, más complicaciones surgen y más difíciles de tratar.
Las personas mayores son propensas a sufrir complicaciones relacionadas con la edad, como arteriosclerosis, hipertrofia cardíaca compensatoria, etc., que son más evidentes. La arteriosclerosis reduce la elasticidad de las propias arterias. El resultado será la promoción de la hipertensión y la dificultad del tratamiento antihipertensivo.
3. Las direcciones de tratamiento son diferentes y la mayoría de las personas gordas tienen una mejor mentalidad. Las personas delgadas son propensas a sufrir cambios de humor y el tratamiento consiste principalmente en ajustar su mentalidad.
El ajuste psicológico también es una parte importante de la intervención en el estilo de vida para la hipertensión. Todos los pacientes con hipertensión requieren un ajuste psicológico. Esta es una forma de evitar las fluctuaciones de la presión arterial provocadas por los cambios de humor. Mediante la intervención, se puede ajustar la mentalidad del paciente y éste puede mantener su impulso, lo que tiene un buen efecto en el mantenimiento de la estabilidad de la presión arterial. Pero a las personas delgadas les resulta más difícil controlar sus emociones y necesitan una orientación correcta.
Los pacientes con hipertensión deben controlar su presión arterial regularmente y tomar medicamentos bajo la supervisión de un médico si la intervención en el estilo de vida no es efectiva. Ajustar su forma de pensar también es una intervención importante en su estilo de vida.