¿Cuántos metros cuadrados se necesitan para una fábrica de producción de mascarillas?
El estándar mínimo para una fábrica de cosméticos es de 2.000 metros cuadrados.
Las mascarillas faciales son una categoría de productos para el cuidado de la piel que se utilizan para hidratar la piel y además tienen múltiples funciones como hidratar, nutrir, nutrir, mejorar la apariencia y limpiar en profundidad.
La mascarilla facial es un cosmético que se utiliza desde hace mucho tiempo. Ya en las pirámides del antiguo Egipto, se sabe que se utilizan algunas materias primas naturales, como tierra, ceniza volcánica, lodo marino, etc., para aplicarlas en la cara o el cuerpo para tratar algunas enfermedades de la piel. Posteriormente, se desarrolló mezclar lanolina con diversas sustancias como miel, flores de plantas, huevos, sémola, frijoles, etc. para hacer una suspensión y aplicarla en el rostro para tratamientos de belleza o para tratar algunas enfermedades de la piel.
Los egipcios extendieron esta habilidad a Grecia, luego a Roma y finalmente a toda Europa. En los siglos VIII y IX, el desarrollo de la civilización se trasladó al Medio Oriente, al tiempo que contribuyó a promover el Renacimiento europeo. Durante el Renacimiento se desarrolló enormemente la química cosmética y la industria de las fragancias, que estaban subordinadas a las disciplinas médicas. En los siglos XVII y XVIII, la mayoría de los cosméticos se producían en talleres familiares. No fue hasta los siglos XIX y XX que se produjeron cambios significativos y la industria cosmética se fue formando gradualmente.
Las máscaras faciales se hicieron populares durante la dinastía Tang en China y eran populares entre las mujeres aristocráticas. Los clásicos registran que Concubine Yang usó ungüento de rubí hecho de almendras frescas, polvos ligeros y talco como ingredientes principales, complementados con borneol, almizcle y clara de huevo.
En las décadas de 1970 y 1980, el desarrollo de máscaras faciales pasó lentamente de depender de la naturaleza a la tecnología científica. Actualmente, productos con clara eficacia y respaldo científico se han convertido en la demanda de los consumidores.