¿Cuáles son los pros y los contras de salir a bolsa o no hacerlo?
La cotización en bolsa favorece la mejora de la estructura de gobierno corporativo de la empresa, aclara la propia estrategia de desarrollo de la empresa y establece pragmáticamente las bases para el desarrollo corporativo. La cotización tiene una serie de requisitos estrictos, especialmente la estructura de gobierno corporativo y el sistema de divulgación de información de la empresa.
Para cumplir con estos requisitos, las empresas deben mejorar el nivel de transparencia operativa y la estructura de gobierno corporativo, de modo que la empresa pueda evolucionar gradualmente de una "empresa rebelde" y una "empresa familiar" a una empresa moderna.
Desventajas de la cotización pública de la empresa: la divulgación de información hace público el estado financiero. La administración de la empresa debe ser especialmente consciente de que con la cotización pública de la empresa, la empresa debe revelar mucha información sobre la empresa de manera oportuna y. Las empresas que cotizan en bolsa también deben publicar cierta información y cierta información de pronóstico relacionada con el desempeño de la Compañía.
Además, la salida a bolsa de la empresa sin duda dará lugar a más investigaciones detalladas sobre la empresa, su desempeño y sus directores. La junta directiva debe estar preparada para una exposición mediática más frecuente, que involucra principalmente el estado financiero y la estrategia comercial de la empresa. Al mismo tiempo, la junta directiva debe publicar rápidamente la información más reciente sobre el desarrollo de la empresa, ya sea positiva o negativa.
La dilución reduce los derechos de control. Las acciones son derechos de propiedad y derechos de control, lo que otorga a los inversores derechos de voto y les permite influir en las decisiones de la empresa.
Una vez que una empresa cotiza en bolsa, sus principales decisiones operativas y de gestión, como la retención de beneficios netos, el aumento de capital o la fusión, etc., deben ser aprobadas por los accionistas en la asamblea anual. Por lo tanto, después de cotizar en bolsa, la junta ejecutiva no sólo puede tomar decisiones estratégicas según sus propios deseos, sino que primero debe obtener el permiso de los principales accionistas, lo que significa que el control del jefe sobre la empresa se debilita después de cotizar en bolsa.