Las características más destacables de los patines Clapp son las siguientes
Actualmente, todos los patinadores de velocidad utilizan "patines Klepp". Quizás pocos fanáticos del hielo sepan que esta hoja plateada tiene una historia de más de 100 años. Desde su invención en 1884 hasta su aplicación a gran escala en la década de 1990, los patines Claypool han atravesado un largo y tortuoso viaje, desencadenando una revolución en el patinaje de velocidad.
En la década de 1980, el biomecánico holandés Gerrit Jan van Ingen Schenau se convirtió en un pionero de los patines Klepp. Ya en 1981 escribió una tesis doctoral en este ámbito.
Sin embargo, cuando él y el fabricante de patinetas Viking solicitaron una patente europea, descubrieron que la idea ya había sido patentada, y Karl Hannerz de Alemania ni siquiera fue la primera persona en patentar los patines Klepp (1894). Entre 1884 y 1937, se concedieron cinco patentes basadas en la idea de que los patines se movían en relación con los patines.