¿Qué es una empresa social?
Cabe señalar que, aunque Grameen Bank ha ayudado a cientos de miles de personas pobres, no es una organización de bienestar público. Las empresas sociales son ante todo empresas, con exigencias de ganancias, impuestos de acuerdo con las regulaciones y dividendos para los accionistas. Esto es fundamentalmente diferente de varias fundaciones caritativas representadas por la Fundación Bill Gates. Aunque las fundaciones caritativas también realizan operaciones de capital, no pueden obtener ganancias y dividendos por sí solas. Deben ayudar a las personas pobres y a las instituciones necesitadas de manera no comercial.
En términos generales, ¿cuáles son las similitudes y diferencias entre las empresas sociales y las empresas comerciales? En términos generales, las empresas sociales logran algunos objetivos sociales de manera comercial; en consecuencia, las empresas comerciales apuntan principalmente a obtener ganancias y no se preocupan por los objetivos sociales; esto suele considerarse lo que las ONG y los gobiernos deberían hacer. Sin embargo, esta afirmación también ha sido cuestionada por algunos académicos, quienes creen que esta distinción comprende de manera estricta los objetivos sociales de las empresas sociales.
En este caso, ¿por qué deberíamos enfatizar por separado las características de las empresas sociales? Una razón importante es que las empresas sociales tienen características tanto comerciales como de bienestar público. Por un lado, su modelo operativo es comercializado, asegurando el profesionalismo y eficiencia operativa de la organización, así como su desarrollo sustentable en términos de recursos, por otro lado, su negocio se acerca más a las empresas de bienestar público; También se puede decir que las empresas de bienestar público se han transformado por medios comerciales, haciéndolas más eficientes y sostenibles.
Hablemos primero de la actualmente muy popular “responsabilidad social corporativa”. La comprensión de muchas personas sobre la responsabilidad social corporativa todavía se encuentra en la etapa de "donar dinero y materiales" y no han vinculado la responsabilidad social corporativa con la estrategia y las capacidades competitivas de la propia empresa. Michael Porter, profesor de la Escuela de Negocios de Harvard, señaló claramente: "El bienestar público de una empresa no es una cuestión de que el director ejecutivo se sienta bien. Si no tiene nada que ver con la competitividad y las habilidades de la empresa, debería ser tarea del gobierno y de las organizaciones benéficas".
Las empresas comerciales también pueden utilizar la idea de empresas sociales para realizar tareas de bienestar público. Michael Porter cree que ninguna empresa tiene la capacidad suficiente para resolver todos los problemas sociales. Deben elegir problemas sociales que se superpongan con su propio negocio para resolverlos. La clave para elegir no es si una causa es noble, sino si puede crear valor compartido, beneficiando tanto a la sociedad como a las empresas. Define este enfoque como la creación de valor compartido (CSV) para reemplazar la tradicional responsabilidad social corporativa (RSC).