El níquel Raney es una aleación de níquel-aluminio compuesta de granos finos con una estructura porosa.
El método de preparación consiste en tratar la aleación de níquel-aluminio con una solución concentrada de hidróxido de sodio. Durante este proceso, la mayor parte del aluminio reacciona con el hidróxido de sodio y se disuelve, dejando muchos microporos de diferentes tamaños. De esta manera, el níquel Raney es un polvo gris fino en la superficie, pero desde una perspectiva microscópica, cada pequeña partícula del polvo tiene una estructura porosa tridimensional, lo que aumenta en gran medida su superficie y aporta una alta actividad catalítica. Ampliamente utilizado como catalizador heterogéneo en reacciones de hidrogenación en síntesis orgánica y producción industrial. Sin embargo, "catalizador de estructura metálica" o "catalizador de metal esponjoso" se utiliza para referirse a un catalizador que tiene una estructura microporosa y propiedades físicas y químicas similares al níquel Raney.