¿Cómo escribir tus pensamientos después de ir a Novosibirsk?
De camino a Beijing, tuve que viajar por toda Siberia, el noreste de China y el norte de China. Un viaje por Siberia no causará una gran impresión, especialmente si es la primera vez. La inmensidad de Rusia es asombrosa. Después de un día, una semana o diez días de viaje, todavía estás en Rusia. Más allá de los Montes Urales y una cadena de montañas a lo largo del lago Baikal, el país es completamente llano.
Al salir de la parte europea de Rusia, la población se vuelve muy escasa; durante horas y horas no se ven pueblos ni habitantes. Sólo hay unas pocas casas cerca de la estación. Por lo general, cuando el tren llega a la estación, todos los residentes locales corren y miran fijamente a los pasajeros del tren. Especialmente de noche, cuando el tren con barras de luces está iluminado, se pueden ver en los vagones las elegantes figuras de los residentes de la ciudad que vienen de Shanghai u otros puertos del Lejano Oriente. Estos pasajeros parecen ser de otro planeta para los lugareños. ¡Cuántos celos y resentimientos inspirarían estos extranjeros vestidos de pieles en los corazones de quienes pasaron su vida en aquellas estaciones condenadas! Me imaginé a una chica esperando en el andén que aún no había perdido su sueño. Escuchó el sonido de un tren entrando a la estación y vio el tren lujosamente decorado entrando lentamente. El tren se detiene en la estación durante cinco minutos. Los pasajeros saltaban al andén como si fueran del país de las hadas; se reían y bromeaban. Se oyó otro silbido, el tren desapareció con los pasajeros y la oscuridad, el vacío y la oscuridad volvieron a envolver el andén.
Es tan injusto que algunas personas puedan ir de un lugar a otro y vivir una vida de lujo, mientras que otras tengan que quedarse en lugares olvidados y vivir una vida miserable. No hay duda de que esto provocará ira e insatisfacción, y creo que los trenes que pasaban por Siberia desempeñaron un papel importante para despertar a los habitantes de Siberia y acelerar así la llegada de la revolución.
La inmensidad del espacio y el paisaje desierto empiezan a conmoverte, mientras que los pasajeros prefieren matar el tiempo con comidas, té interminable y jugando al póquer...