Composición sobre la época calentada por el amor maternal. Seiscientas palabras.
El tiempo de ser calentado por el amor maternal
Cuando hay amor, hay calidez. El amor tiene todo tipo de amor, y el amor maternal es grande. Me siento muy feliz.
Cuando era niño, solía salir corriendo a jugar y siempre me ensuciaba. Pero mi madre no me regañaba ni me pegaba, sino que razonaba conmigo. Siempre me daba algunos ejemplos sencillos para que yo experimentara, descubriera y comprendiera estos caminos.
A veces no quiero hacer las tareas del hogar, así que se las dejo a mi madre. Mi madre me decía: "No puedes ser perezoso. Si crees que es correcto hacerlo, entonces puedes hacerlo. Mi madre no te dirá nada, pero mi madre te preguntará, si tu madre quiere ser perezosa, ¿estás dispuesta a ayudarla?" "Mamá, ¿has terminado todas las tareas del hogar?" Tan pronto como mi madre terminó de hablar, mi interés en ser perezosa desapareció sin dejar rastro. Sabía que estaba mal que yo haz esto. Entonces le dije a mi madre: "Mamá, sé que estaba equivocada. Esto está mal. No quiero ser una persona vaga. La gente tiene que luchar". Mi madre me tocó la cabeza y sonrió. En ese momento, un sentimiento llamado calidez entró en mi corazón.
Cuando estuve enferma, mi madre me cuidó muy bien y mi corazón ya estaba lleno de calidez. Cuando estaba triste, mi madre estaba a mi lado animándome constantemente, para que pudiera superar mi tristeza rápidamente.
Cada vez, mi madre siempre me calienta de diferentes maneras, y este calor está lleno de luz suave, atrayéndome para seguir acercándome a ella. El amor de madre siempre contiene mucha calidez. Mientras sientas y descubras seriamente la calidez, descubrirás que no puedes vivir sin ella.
El calor del amor maternal ha llenado mi corazón. Su calor no es el calor de extender la mano para hornear en una estufa en invierno, ni es el calor de un calentador, sino un calor llamado amor maternal. , diferente del calor de una estufa y diferente del calor de un calentador. El calor del amor maternal calentará tu corazón. El calor de un calentador sólo puede calentar tu cuerpo, pero no tu corazón.
El calor del amor maternal es más cálido que cualquier calentador o calentador de la estufa.