Formato de escritura de discursos
El formato correcto del discurso es el siguiente:
1. Escribe la dirección en el cuadro superior, que se determina según el oyente y el contenido del discurso.
2. Escribe un saludo en la siguiente línea, como por ejemplo hola a todos.
3. A continuación, escribe el texto principal. El texto principal debe incluir la apertura, el cuerpo principal y el final. Al escribir, debes resaltar el tema y tus propios puntos de vista y opiniones.
4. Comienza una nueva línea y escribe palabras de agradecimiento en el cuadro superior.
Ensayo de muestra:
Estimados profesores y estudiantes:
¡Hola a todos! El título de mi discurso de hoy es "El primer sueño".
El sueño original está en tus propias manos. No regreses a la mitad del camino al lugar al que más deseas llegar. Si el sueño nunca cayera por el precipicio, sería un momento crítico. ¿Cómo podemos entender que las personas persistentes tengan alas de sueños?
He perseguido, perdido y comprometido desesperadamente, pero ninguno de ellos puede aniquilar el momento de alegría en el que el sueño se hace realidad. En el momento en que los sueños y la realidad chocan, veo la brecha entre ellos. Y esto es sólo una brecha de ensueño. Se requiere demasiado coraje, demasiado talento y demasiado entusiasmo para encender el clímax de la juventud.
Su Qin, político durante el Período de los Reinos Combatientes. Cuando era joven, no tenía muchos conocimientos. Fui a muchos lugares a trabajar, pero no me tomaban en serio. Su familia también lo despreciaba. Esto lo estimuló mucho. Por lo tanto, decidió estudiar mucho.
A menudo estudiaba hasta altas horas de la noche y estaba muy cansado, así que se le ocurrió una manera de pincharse el muslo con un punzón en cuanto se quedaba dormido. De esta manera, de repente sentí dolor, así que me desperté y seguí leyendo. Sólo entonces surgió la historia del "escalofrío de Su Qin".
¿El joven Su Qin sabía cómo ejercer moderación hace miles de años, y mucho menos todos nosotros ahora? Por favor, haz buen uso de tus días de juventud. No esperes hasta el día en que estés entumecido en tus sueños para saber cómo arrepentirte. No esperes hasta el día en que tu juventud se acabe para saber cómo apreciarla.
Recordemos todos nuestros sueños originales, encendamos nuestra pasión, sudemos todo el camino, bebamos todo el polvo y mastiquemos todas las dificultades. Que la juventud siga ardiendo bajo la bandera roja. Todos somos águilas luchando en el cielo y en el vasto mar. Todos somos jóvenes con sueños y logros. Todos estamos cabalgando sobre el viento y las olas, superando espinas y espinas. ¡Sólo por el primer sueño, sólo por la luz más deslumbrante!
Esto concluye mi discurso, ¡gracias a todos!