¿Qué debo hacer si mi hijo desobedece?
En primer lugar, los padres no deben dar ejemplos negativos a sus hijos.
Los padres son los primeros maestros en la vida de sus hijos, y los niños en la infancia tienen habilidades de imitación particularmente fuertes y se dejan influenciar fácilmente por sus El entorno familiar y la influencia de los estilos educativos de los padres. Para reducir el comportamiento agresivo de los niños hacia los demás, los padres deben cambiar sus métodos educativos y poner fin resueltamente al castigo corporal de sus hijos.
En segundo lugar, comuníquese más con sus hijos
Mientras están ocupados en el trabajo, los padres también deben dedicar el mayor tiempo posible a comprender a sus hijos, comunicarse con ellos y hacer todo lo posible para educarlos. sus hijos en la escuela y la escuela tengan una comprensión integral del desempeño en la familia. De esta manera, una vez que el niño es realmente desobediente, los padres pueden entender cómo guiarlo en lugar de resolver el problema golpeándolo y regañandolo. No importa cuán pequeños sean los niños, los padres deben tratarlos por igual. Algunos padres groseros siempre están acostumbrados a golpear y regañar a sus hijos indiscriminadamente, lo que fácilmente puede hacer que los niños se sientan resentidos con sus padres. De esta manera, los padres no comprenderán a los niños y la brecha entre ellos y sus padres se hará cada vez más profunda. Por lo tanto, los padres deben comunicarse más con sus hijos para hacerles saber que sus padres los comprenden. De esta manera, los niños también pueden sentir el amor y el cuidado de sus padres y así corregir activamente sus propios errores.
En tercer lugar, siempre razona con tus hijos en todo
Cuando los niños son desobedientes o obstinados, los padres no solo deben comunicarse más con sus hijos en la vida diaria, sino también prestar atención a su propia educación. métodos. Los padres deberían razonar más con sus hijos y podrán educar a niños buenos y sensatos sin pegarles ni regañarlos. Los padres deberían razonar más con sus hijos en la vida real y permitirles tener empatía, para que puedan aprender a pensar desde la perspectiva de los demás y darse cuenta de sus propios defectos. Los hechos han demostrado que esto facilita que los niños acepten espontáneamente las opiniones de sus padres y el efecto educativo es más ideal.
Cuarto, utilizar educación de aprecio en lugar de castigo corporal para los niños.
Brindar educación de aprecio a los niños para que puedan experimentar el amor incondicional de sus padres por ellos.