El número de mujeres que compran casas en las grandes ciudades está aumentando. ¿Cuál es más confiable, el matrimonio o una casa?
Lo que una mujer merece presumir no es el tamaño de su villa, sino cómo los hombres que la rodean la miman como a una princesa. Después del divorcio, muchas mujeres predican en voz alta que no pueden casarse por amor, sino sólo por cosas materiales. Aunque el amor sin base material no es práctico, quiero preguntarles a estas mujeres, lo que eligieron al principio fue solo lo que pensaban que era amor, no una visión madura del amor. Hay personas felizmente casadas por todas partes a mi alrededor.
En mi opinión, además de la falta de sensación de seguridad, el aumento del número de mujeres que compran casas en las grandes ciudades también se debe a la preservación de su riqueza. La tasa de divorcios en los tiempos modernos es muy alta, y después de un divorcio, lo único que una mujer puede tener segura probablemente sea una casa. En los últimos días, los medios de comunicación han informado abrumadoramente sobre la disminución de la tasa de matrimonios, pero en realidad refleja el aumento de la tasa de divorcios.
Como criatura avanzada, el matrimonio es un proceso por el que todo el mundo debe pasar. Nadie quiere estar verdaderamente solo toda la vida. Para esos amigos que siguen diciendo que quieren estar solos por el resto de sus vidas, ¿todavía tienen esos pensamientos en plena noche, en la fría cama?
El matrimonio es la base de la reproducción humana. Si nuestros predecesores fueran como algunas personas con puntos de vista incorrectos y prefirieran envejecer solos y sin cosas materiales, no habría una civilización moderna como la nuestra. El matrimonio debe ser puro y sagrado. Si se mezcla con demasiadas impurezas, naturalmente se deteriorará y terminará. ¡Las personas que dicen que el matrimonio es una tumba son simplemente personas que no entienden el matrimonio!
Las mujeres pueden comprar una casa, pero el matrimonio es más importante. La persona adecuada, el momento adecuado y el matrimonio adecuado son una felicidad que no se puede comparar con cien casas. La vida es fugaz y nuestros finales son todos iguales. ¿Por qué no hacer que nuestro proceso vital sea más emocionante?