¿Bajo qué circunstancias se realizan las pruebas de carbonatación y de rebote del hormigón?
Durante la aceptación estructural, la entidad necesita recuperarse. La determinación final de la fuerza de rebote depende de factores como la profundidad de carbonatación.
Una vez hidratado el cemento, se libera alrededor del 35% de hidróxido de calcio, que juega un papel importante en el endurecimiento del hormigón. La superficie del hormigón endurecido se ve afectada por el dióxido de carbono, que cambia gradualmente el hidróxido de calcio y genera carbonato de calcio con mayor dureza, es decir, se produce la carbonización del hormigón, lo que tiene un impacto significativo en la medición de la resistencia por el método de rebote.
La carbonización aumenta la dureza superficial del hormigón y el valor de rebote, pero tiene poco efecto sobre la resistencia del hormigón, afectando así a la correlación entre resistencia y valor de rebote. Diferentes profundidades de carbonatación tienen diferentes efectos sobre el concreto. Para concretos con diferentes niveles de resistencia, los efectos de la misma profundidad de carbonatación también son diferentes.
Existen muchas formas de eliminar los efectos de la carbonización. La práctica extranjera es eliminar la capa carbonizada de hormigón o no permitir pruebas de hormigón de mayor envejecimiento. Las investigaciones realizadas en mi país muestran que la profundidad de la carbonatación se utiliza como parámetro de medición de la fuerza para reflejar el impacto de la carbonización. Aunque el valor de rebote aumenta con el aumento de la profundidad de carbonización, cuando la profundidad de carbonización alcanza los 6 mm, este efecto básicamente no aumentará.