Antes de la liquidación de fin de año de la empresa, ()
Es fin de año y todos en la empresa están muy ocupados. Ya sea una gran empresa con una escala de cientos de millones o una pequeña empresa con sólo unos pocos millones en ingresos. Ya sea una empresa estatal, una empresa privada o una empresa extranjera, las cuentas financieras deben prepararse todos los años. La única diferencia es la necesidad y la complejidad. Las cuentas financieras anuales son un resumen y un reflejo de los resultados operativos anuales de la empresa. También son la base para comprender la "situación familiar" y la planificación y el presupuesto para el próximo año.
Las cuentas financieras de fin de año pueden reflejar las condiciones operativas de la empresa, es decir, el balance refleja el estado financiero y la cuenta de resultados refleja los resultados operativos. El estado de flujo de efectivo muestra la administración del dinero y otras condiciones operativas. También puede mejorar el nivel de gestión de las empresas. Al resumir las actividades operativas y los ingresos y gastos financieros, podemos descubrir las deficiencias y las áreas de mejora en la gestión empresarial, o encontrar experiencias que valga la pena resumir y promover.
Contenido de las cuentas finales anuales:
1. Inventario de activos
Al final del año, la empresa deberá organizar personal especializado para realizar la contabilidad de los bienes físicos. activos como fondos monetarios, inventarios y activos fijos, así como realizar un inventario integral de activos intangibles como derechos de patente. Verificación del inventario (generalmente el departamento de gestión física preparará el inventario primero, luego el personal financiero cooperará con la supervisión del inventario y los activos intangibles deben evaluarse) para garantizar que las cuentas sean consistentes. Cualquier pérdida o daño a los activos descubiertos durante el inventario debe informarse con prontitud y manejarse en consecuencia.
2. Liquidación de reclamaciones y deudas
Al final del año, las empresas deben liquidar las cuentas por cobrar, las cuentas por pagar (incluidas las reservas, etc.) y otras reclamaciones y deudas. Para las cuentas por cobrar, es necesario tomar la iniciativa de enviar una carta de conciliación al deudor para su confirmación por escrito. Para las cuentas por pagar, es necesario verificar cuidadosamente la carta de conciliación del acreedor al recibirla. Las empresas de grandes grupos también deben examinar y confirmar las comunicaciones y transacciones entre unidades dentro del grupo. Para las cuentas por cobrar, es necesario evaluar la posibilidad de recuperación y realizar las provisiones por deterioro correspondientes.