¿Cuáles son los peligros de la obesidad? ¿Cómo prevenirlo?
Peligros de la obesidad
1. La obesidad a largo plazo puede provocar algunas enfermedades en las funciones corporales, como hipertensión, diabetes, hiperlipidemia, ácido úrico y deficiencia de calcio en huesos y articulaciones. Los trastornos de absorción afectarán la calidad del sueño de los niños y su inteligencia cerebral también se verá afectada en consecuencia;
2. Los niños sufren daños psicológicos y son fácilmente discriminados por los demás, lo que les provoca una pesada carga psicológica y se hacen suyos. La salud mental tiene un costo; lidiar con la obesidad infantil de una manera positiva y saludable es fundamental para el crecimiento de un niño.
Prevención de la obesidad:
1. Cultivar en los niños el desarrollo de buenos hábitos de vida. La mayoría de los niños obesos son causados por malos hábitos en la vida. Por lo tanto, en la vida diaria, los padres deben organizar la dieta de sus hijos de manera razonable y organizar tres comidas al día de acuerdo con la edad del niño y los nutrientes necesarios para su desarrollo físico. Después de una comida, déle a su hijo menos alimentos fritos, con almidón, picantes, crudos y fríos.
2. Potenciar el ejercicio físico en los niños. Los niños que padecen obesidad suelen comer más pero hacer menos ejercicio por lo que, además de desarrollar buenos hábitos alimentarios en la vida diaria, también deben aumentar progresivamente el tiempo de ejercicio físico. Esto no sólo ayudará a los niños a fortalecer su condición física sino también a mejorar su inmunidad corporal.
3. Beber menos bebidas carbonatadas. A muchos niños que padecen obesidad les encanta beber bebidas carbonatadas como Coca-Cola y Sprite. Estas bebidas contienen mucha azúcar y calorías. El exceso de bebidas carbonatadas no solo hará que los niños aumenten de peso, sino que también corroerán sus dientes. Controlar el número de veces que sus hijos beben bebidas carbonatadas y sustituirlas por agua y zumo. Beber un vaso antes de las comidas no sólo complementará la nutrición sino que también aumentará la saciedad.
4. Consume carne y verduras de forma equilibrada. A la mayoría de los niños obesos les gusta comer carne y odian comer verduras desde el fondo de su corazón, lo que conduce a una ingesta nutricional desequilibrada en el cuerpo del niño y hace que el niño sea parcial y quisquilloso con la comida. Los padres deben alimentar a sus hijos no sólo con carne sino también con verduras, incluidas más frutas.