Cómo desarrollar buenos hábitos
1. Empieza con cosas pequeñas y presta atención a los detalles.
Si los hábitos de una persona son buenos o no, y si su calidad es alta o no, a menudo se reflejan en pequeñas cosas. Para distinguir el bien del mal, recuérdalo en cualquier momento. Por ejemplo, preste atención a cómo se para, se sienta, camina y come, preste atención a la pulcritud de cada tarea o examen, preste atención a la etiqueta al tratar con los demás, etc. Puede resultar un poco "agotador" al principio, pero no pasará mucho tiempo antes de que te acostumbres y te beneficiará toda la vida.
2. Haz un buen comienzo en lugar de un mal comienzo.
Los hábitos se desarrollan a través de procesos, y todo proceso tiene un comienzo. Mientras hayas pensado en lo que vas a hacer, debes empezar con decisión, sin procrastinar ni esperar. Por ejemplo: planeo memorizar palabras, ¡está bien! Empiece a memorizar. Voy a escribir un diario, ¡vale! Empieza a escribir. Después de un tiempo, sientes que se ha convertido en parte de tu vida y ni siquiera sientes nada al respecto. Entonces lo harás de forma natural y se formarán buenos hábitos. Al contrario, nunca empieces algo malo. Porque desde el principio te darás un capricho.
En cuanto a los juegos de computadora, también he estado expuesto a RPG, FIFA, StarCraft y CS. ¡Son divertidos y emocionantes! Pero realmente retrasa las cosas. Quedarás atrapado y atrapado en él. Si te sientes "bien" por un tiempo, es posible que no te sientas "bien" por el resto de tu vida. Hay otra cosa que se llama "Magic: The Gathering", no te obsesiones con ella. Podemos jugar y cuanto mayor sea la eficiencia del aprendizaje, más tiempo tendremos para jugar. Pero debes jugar cosas que sean buenas para tu salud física y mental, y debes poder controlarte.
La gente es una cosa muy extraña. Hay cosas que debería hacer y hay cosas que quiere hacer. Lo terrible es que las personas a menudo no quieren hacer las cosas que deberían hacer y a menudo no deberían hacer las cosas que quieren hacer. ¿Qué hacer? Sólo puedes controlarte a ti mismo, encontrar maneras de incluir lo que quieres hacer dentro del alcance de lo que debes hacer y hacer lo que debes hacer con interés. Cuando puedas hacer esto de manera más consciente, serás maduro. Ahora, algunos de mis compañeros y yo hemos podido disfrutar de una gran felicidad por el éxito del aprendizaje, incomparable a cualquier juego.
3. Aprieta los dientes y persevera.
Para empezar bien hay que perseverar. Ante las dificultades hay que apretar los dientes y perseverar, y nunca relajarse. Comencé a llevar un diario en el primer grado de la escuela primaria y no he dejado de escribirlo ni un solo día. Durante más de 3000 días, hubo momentos en los que estaba demasiado cansado para moverme y momentos en los que estaba demasiado enfermo para levantarme de la cama. ¿Qué debo hacer? Aprieta los dientes y aguanta. Pon el diario sobre la almohada y escribe una frase. Después, incluso tu propio espíritu te conmoverá, y entonces valorarás tus logros y serás cada vez menos capaz de soportar rendirte, por lo que se convertirá en un buen hábito.
4. Crear un buen ambiente.
Puede ser acordado por varias personas, o puede ser iniciado por la clase. Todos deben supervisarse unos a otros para cumplir con algunas cosas buenas y eliminar y superar las malas. Esto es muy beneficioso, no sólo para desarrollar buenos hábitos, sino también para tener buenos amigos y un buen ambiente colectivo.
5. No pongas excusas.
Se dice que hay una regla en la Academia Militar de Estados Unidos en West Point: ¡No hay excusas! Esto es muy útil para desarrollar buenos hábitos. Es más fácil para las personas perdonarse a sí mismas. Si las cosas no se hacen bien, intentan encontrar algunas razones para sentirse a gusto. Esto es un mal hábito. Te debilita, te vuelve perezoso, te hace huir y, como resultado, pierdes el coraje. Hay un dicho famoso: ¡Los perdedores encuentran excusas, los ganadores encuentran métodos!
6. Aprovecha cada oportunidad para capacitarte y acostumbrarte a servir a los demás.
Le sugiero que si tiene la oportunidad, esté dispuesto a realizar algún trabajo social, como por ejemplo: cuadros de clase, representantes de departamento, etc. No sólo no retrasa el aprendizaje, sino que es una buena oportunidad para ejercitar el sentido de responsabilidad, la conciencia de servicio a los demás y la capacidad laboral. ¡Formar estas cosas también es un buen hábito!